Enfriamiento del cerebro
Durante el embarazo, el cerebro del feto está desprotegido frente a una amplia gama de peligros. Entre los peligros se encuentran las enfermedades graves de la madre, los problemas de la placenta o el ombligo, o un parto difícil. Cuando un recién nacido se ve privado de aire durante el parto, la falta de oxígeno en el cerebro puede producir una condición conocida como encefalopatía hipóxico-isquémica (HIE).
Una vez que el recién nacido desarrolla la HIE, ésta empieza a evolucionar en las siguientes horas. La falta de suministro de oxígeno al cerebro desencadena una serie de otros efectos a medida que el cuerpo intenta repararse a sí mismo. Cuando la HIE es leve, el enfoque natural del organismo es eficaz. Sin embargo, en los casos moderados o graves, los esfuerzos desesperados del cuerpo pueden causar más daños cerebrales.
El daño causado al cerebro no es inmediato. Un desbordamiento de las reacciones químicas provoca daños cerebrales. Sin embargo, existe una ventana de varias horas antes de que el daño sea permanente. Por lo tanto, los investigadores han teorizado que puede ser posible bloquear esta reacción química en cadena. Bloquear la reacción química en cadena podría minimizar los daños permanentes.
Una nueva y sencilla técnica está dando a los bebés heridos la oportunidad de llevar una vida sana y normal. Las investigaciones sugieren que la hipotermia leve (enfriamiento del cuerpo)
disminuye el riesgo de daño cerebral en los bebés que sufren HIE. La hipotermia se consigue de dos maneras diferentes. Un método consiste en utilizar un tapón lleno de líquido, y el otro en
utilizar un tapón único refrigerado por agua. Ambas técnicas están diseñadas para disminuir la temperatura del cerebro. Reducir la temperatura del recién nacido entre 37 y 39 grados
Fahrenheit durante 72 horas parece apagar la mayor parte de la reacción dañina. Además, se cree que el enfriamiento del bebé ralentiza la reacción química y permite que el cuerpo se repare.
Estadísticas sobre lesiones en el parto/enfriamiento del cerebro
● 1 de cada 1.000 recién nacidos sufre asfixia al nacer.
● 4 de cada 1.000 recién nacidos nacen con algún tipo de daño cerebral.
● 3 de cada 5 recién nacidos que sufren HIE grave morirán.
● 1 de cada 5 recién nacidos que sufren HIE morirá durante la infancia. 1 de cada 4 que
sobrevivan tendrá problemas neurológicos permanentes.
● Cada año, aproximadamente 10.000 bebés sufren HIE de moderada a grave.
● Los estudios informan de una reducción superior al 25% en el número de muertes o
discapacidades graves de los nacidos con HIE con enfriamiento cerebral.
Hipotermia cerebral
Inducir la hipotermia a los recién nacidos que padecen HIE ha demostrado ser la única intervención que mejora las posibilidades de supervivencia. El enfriamiento cerebral se está utilizando ampliamente en las unidades neonatales de Estados Unidos.
Sin embargo, el momento es vital. Dentro de las seis horas siguientes al parto, debe iniciarse el enfriamiento cerebral. Una vez nacido el bebé, la decisión de iniciar el enfriamiento cerebral la toma el médico. El bebé debe tener un daño cerebral moderado, tener menos de seis horas de vida, ser pretérmino tardío (más de 36 semanas) o estar a término. Los estudios han demostrado aproximadamente un 27% de disminución de las discapacidades y la muerte.
Contacte con un abogado
Si su hijo ha desarrollado una parálisis cerebral o ha sufrido una lesión cerebral, los daños podrían haberse evitado o disminuido con un tratamiento de enfriamiento cerebral. Si el enfriamiento cerebral no se ofreció como tratamiento, podría tener un caso de mala praxis médica o negligencia. Le recomendamos que se ponga en contacto con nosotros inmediatamente para una evaluación gratuita de su caso. Llámenos en cualquier momento al (877)776-9558 o llene un formulario de consulta aquí para iniciar el proceso.